
Joven chileno es tragado y escupido por una ballena jorobada
Un joven chileno, Adrián Simancas, fue tragado por una ballena jorobada mientras kayakeaba pero sobrevivió al ser escupido.

Una impactante experiencia vivió un joven chileno, quien fue engullido por una ballena jorobada mientras navegaba en kayak por las aguas del estrecho de Magallanes, en Chile. La sorprendente historia de Adrián Simancas ha capturado la atención de medio mundo, desafiando la idea tradicional de que ser tragado por una ballena es una fatalidad inminente.
Joven es devorado por una ballena jorobada
El evento ocurrió en la bahía El Águila, donde Adrián estaba disfrutando de un tranquilo día de navegación en su kayak. De repente, una ballena jorobada emergió de las profundidades y lo engulló rápidamente. El momento fue tan inesperado que el padre de Adrián, Dell Simancas, quien se encontraba con él, no alcanzó a comprender lo que sucedía. Solo se dio cuenta de la ausencia de su hijo en cuestión de segundos.
El propio Adrián recordó la experiencia en una entrevista posterior, revelando que su primer pensamiento fue el de haber sido devorado por una orca, ya que minutos antes había tenido una conversación sobre estos animales con su padre. Sin embargo, a medida que transcurrieron los segundos, se dio cuenta de la realidad de la situación. Sorprendentemente, fue expulsado por la ballena en cuestión de instantes, recuperando su posición en la superficie del agua.
Una experiencia difícil de comprender
La experiencia vivida por Adrián quebranta la percepción común sobre el encuentro con estos majestuosos seres de mar, quienes, a pesar de su tamaño y fuerza, pueden ofrecer una sorprendente interacción con los humanos. Según el joven, tras el encuentro, nunca pasó por su mente que la ballena tuviera intenciones maliciosas. Mas bien, consideró que la ballena se acercó por curiosidad o quizás incluso en un intento de comunicación.
Tras ser expulsado por la ballena, en vez de regresar a su kayak, Adrián optó por nadar hacia su padre. La experiencia lo confrontó con un momento de profundo terror, no por su propia seguridad, sino por la preocupación que sintió por su progenitor. Sin embargo, esta impactante experiencia no se limitó a ser una anécdota. El episodio fue registrado en video, preservando la realidad del encuentro.
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